Aquel conflicto que llego a una instancia insólita compitiendo al mejor estilo futbolero contra su país vecino (Uruguay )en el juzgado de la Haya por en un juicio que trataba sobre la diferente interpretación de una cláusula del famoso Estatuto del Río Uruguay, que pocos ambientalistas realmente sabían de que se trataba.
Luego de quedar desconformes con la instalación de UPM, desconformes con la posición de su propio gobierno, desconformes con el gobierno uruguayo, desconformes con el fallo del tribunal internacional de la Haya y desconformes todo lo que los rodea, la asamblea ampliada de Gualeguaychú resolvió anoche terminar la tregua y volver al piquete de Arroyo Verde sobre la ruta 136 de Entre Ríos.
Con encendidos discursos y sentimientos de "frustración", ahora desconformes por los términos del acuerdo entre Argentina y Uruguay para el monitoreo del río y de la planta de UPM, la mayoría de la Asamblea Ambiental de Gualeguaychú votó por la realización de caravanas y "concentraciones" de dos horas los domingos de septiembre en Arroyo Verde.
Es que para muchos de los "activistas", el piquete era su unica "actividad" y después de tantos años sus lazos son muy estrechos y forman una gran familia. Familia que después de casi 60 días sin verse se volvieron a unir, fruto de esta reunión resolvieron, juntarse por todo el mes de setiembre, todos los domingos a tomar mate de tardecita, un par de horas y de paso recordar viejos tiempos haciendo un piquete. La familia es lo primero.
Trescientas personas respondieron a la convocatoria para la reunión en el club Frigorífico de esta ciudad entrerriana. La asistencia fue sensiblemente inferior al número de participantes que aprobaron la tregua por 60 días el pasado 19 de junio. Una veintena de oradores se manifestaron "decepcionados" y "deprimidos" por los resultados obtenidos y por el rumbo que tomó la manifestación, aún así, decidieron seguir manifestando, suponemos que para ver que rumbo tomará ahora y buscar nuevos motivos para estar desconformes.