No es hora de cambiar
El presidente dijo que en 2006, cuando se instauró el cambio fue por un tema de ahorro energético. Por aquellos entonces, la energía eléctrica se producía en base a petróleo o con las represas hidráulicas, el petróleo estaba muy caro, e implicó ahorrar en una temporada entre US$ 8 y US$ 10 millones.
En la última temporada que se aplicó el cambio de horario, verano 2015, según el primer mandatario, "el ahorro fue ínfimo", por lo cual tomó la decisión de no cambiar la hora éste año y al parecer, es una medida que parece definitiva para el futuro.
Adiós a los atardeceres a las 9 de la noche...