"Jugar a la pelota"
Venga le toy diciendo, no sea tan desconfiada por favor! No no, no le voy a dar ni un beso ni un abrazo ni nada de eso, no se procupe... ¿qué hace con ese metro? Pa la distancia correcta! Pero mija, usté se ta pasando de "protocolar", esto ya es el colmo. ¿Puedo preguntar qué corno lleva en esa bolsita cuasi chismosa pero más chiquita? "Elementos disgregatorios"... bue.
Arrancamos por la base de que la palabra "disgregatorio" no existe, ¿usté sabe eso no verdá Vecina? Me puede explicar, tengo miedo igual de lo que me pueda decir, pero en fin, dígame. Son cositas pa disgregar a las personas que se ponen muy cerca suyo. Bueno, póngale que ta bien, y ¿qué trae? El metro, sí, ya me lo mostró, ¿qué más? Un palo, ¿un palo? ¿pa qué? ¿Pa pincharle las costillas a la gente? Si se arriman mucho, ñácate! Pinchazo intercostal, ta bien; tapabocas varios, pa regalar y ser regalado, ñia... ¿alguna otra cosa? Gas pimienta!! Ta, deje Doña, me alejo un poco sí, tranquila! Listo... así, separaditos por las dudas. Suba el auricular del oído ese que tiene que tengo algo pa contarle. Deje, ayer se me piantó un lagrimón de la emoción. Le cuento.
Salimos con la Gorda y Polilla bebé a dar una vuelta, a buscar palitos y ramitas pa poder prender la estufa a leña... es que el tipo que me vendió la leña me trajo medianos y rolos grandes, la concepción de palos finos la dejó en el baño, tirada por ahí, deje, ni me haga acordar que me re caliento. Como no tengo palos finos, tengo que salir a buscarlos, en fin... salimos ambos 3 pa juntar alguna ramita, hojita seca, tronco podrido, piña, arbol sin talar, lo que sea pa poder prender el fuego y no congelarnos de frío.
En una vuelta de esas, por el barrio, freno en seco y me quedo mirando, me embargó una emoción repentina, ¿qué era? Si se lo digo no me va a creer... niños. Eran unos gurises, niños, entre 8 y 10 años, alguno quizá de menos edad, jugando a la pelota, nunca mejor dicho, en un campito. Pahhh!! Cuantos recuerdos. Canchita de pasto pelado, casi de tierra, arcos de madera todos irregulares; la canchita misma en bajada como debe ser y los gurises con diferentes ropajes, algunos con camisetas de fobal otros con remeras comunes, uno jugaba de camisa! Quizá se haga una idea de todos los recuerdos que vinieron a mi memoria Doña!
El "fulbito" con los gurises de la cuadra, nos íbamos pa lo del Mariano, que en el fondo de la casa tenía una cancha de pasto, claro, el Mariano vivía en la casa que le daban al Director de la UTU, o sea que su "patio" era toda la Institución educativa misma, tremendo terreno pa corretear!! Ta, pero era "campito", con reglas de campito, cómo no! Los 2 mejores iban separados, el Negro Alexander por un lado... ah no me complique la existencia Vecina, era el "Negro" sigue siendo el "Negro" y va a ser el "Negro" por los siglos de los siglos amén! Esa pavada de disminución de la persona porque le digas como toda la vida le dijiste, con cariño y respeto, esa concepción es para retrógrados; son los mismos que terminan todo con la letra "e", pa ser inclusivos, dejatE de jodEr!!
El Negro Alexander pa un lado y el "Chocho" pal otro, no era sobrenombre no, es el apellido del gurí nomás, y con ése apellido ni precisa sobrenombre ¿no? Y como jugaba Chochito! Vos lo mirabas, todo así, gordito petisón, con carita de bueno, de no matar ni una mosca y cuando arrancaba a rodar el balón... deje, nos pegaba cada tornillo! No había manera de sacársela, solamente el Negro podía, a pura fuerza y producto de sus patas largas y que se calentaba después de la 4ta vez consecutiva que el Sebita se la mostraba y se la pasaba por los caños, ahí lo levantaba en la pata. Así eran las peleas también.
Se "trensaban" lindo sí, en aquel tiempo uno era flaco y alto el otro gordito y bajito, pero se sacaban chispas, hoy en día creo que si lo llega a agarrar el "Negro" a Chochito, no le queda ni la carita de bueno. Ta salado el Ale. Uno pa un lado, otro pal otro, se "pisaba" pa elegir jugadores, el gordito más grande casi siempre iba al arco, que te eligieran de último era un decepción. No había juez, las faltas las cobrábamos nosotros mismos Doña, cuanto más alto uno gritaba ante tal patada, ahí se cobraba, siempre si discutían las faltas! El partido duraba hasta que el dueño de la pelota se fuera, o la "Vieja" del Mariano nos llamara pa tomar la leche o cuando caía la noche, no había ni prisa ni tiempos, era nuestro momento! No se precisaba championes de marca, era normal hasta jugar descalzo.
El Mariano jugaba porque ponía la casa y muchas veces la pelota, pero era de los últimos en elegirse; taba el Marce, que hubo un tiempo que se hacía llamar "El Aguila", qué se yo, le había entrado un fetiche con ser golero y el juraba y perjuraba que era arquero y que podía volar... no agarraba ni una, pero al menos el "Gordito" del grupo taba contento porque podía salir a la cancha a pegar alguna patadita, ese no era otro que el "Cabeza", el cual no le gustaba mucho el fobal, pero como era la barra de amigos, se prendía.
Por mi lado, yo era bastante patadura, intercalaba fobal con comer duraznos verdes que crecían en un árbol detrás de uno de los arcos, tonces cada vez que me tocaba ir de golero, me iba pal árbol, eso valía 2 cosas: 1) Las puteadas de mis compañeros porque obvio que siempre me hacían el gol y la 2) era el dolor de panza con el que me iba pa las casas! Jugabamos hasta altas horas de la tarde, nos reíamos y formábamos lazos de amistad; eramos un grupo de amigos, el cual hasta el día de hoy con varios seguimos en contacto. Hoy miro a la gurisada, con sus celulares, sus tablets y sus dibujitos, conectadísimos, con más amigos virtuales que físicos.
Por eso cuando veo a unos niños haciendo algo tan simple como jugar a la pelota en un campito... se me hace un ñudo en el corazón! Digame Vecina, en esa bolsita cuasi chismosa pero más chiquita que lleva, entre todos sus productos de defensa. no tendrá un pañuelito de tela que me preste? Gracias.
Emilio Machado "Pelado" .
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